Las manzanas son frutas de lo más versátiles y se aplican en un montón de recetas. Las consigues durante todo el año y las encuentras en diferentes variedades.
Es rica en vitaminas, principalmente en vitaminas A y C, fósforo, calclio y hierro. Aquí listamos los motivos por los que deberías incluirlas en tu dieta.
Estabilidad intestinal: esto se debe a la gran cantidad de fibra que contiene. Ayuda a prevenir enfermedades como la diverticulitis y a prevenir la aparición de hemorroides.
Reduce el colesterol: esto es gracias a la pectina que contiene. También ayuda a mantener los niveles de insulina, porque libera azúcar a la vez que elimina metales como el mercurio y el plomo.
Ayuda a la salud bucal: tiene naturaleza ácida y astringente, por lo que es ideal para eliminar restos de comida de los dientes.
Comerse una manzana al día ayuda a controlar tanto el apetito como la ingesta de calorías. Es saciante y aporta sólo entre 50 y 80 calorías por pieza.


