(CNN) — El asesino convicto Gonzalo López, quien escapó el mes pasado de un autobús de transporte de prisioneros en Texas, murió en un tiroteo con policías el jueves por la noche, según las autoridades.

Horas antes, las autoridades dijeron que López era el principal sospechoso del asesinato de cinco personas, incluidos cuatro niños, en una casa en el condado de Leon.

López huyó de la casa en una camioneta que luego quedó inutilizada con una tira de clavos en la ciudad de Jourdanton, dijo Jason Clark, del Departamento de Justicia Criminal de Texas, en una conferencia de prensa el jueves por la noche.

López robó este Chevrolet Silverado de la casa donde una familia de cinco miembros fue encontrada muerta, dijeron las autoridades.

López estrelló el vehículo y luego participó en un tiroteo con los agentes, dijo.

«Disparó varias rondas a los agentes y estaba armado con un AR-15 y una pistola», dijo Clark, y agregó que creen que las armas de fuego probablemente fueron robadas de la casa en Centerville donde mataron a la familia. Ningún agente resultó herido.

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López había sido condenado por asesinato, intento de asesinato y secuestro, según el Departamento de Seguridad Pública de Texas. Cumplía dos cadenas perpetuas por esas condenas, según el departamento.

Su fuga cerca de Centerville, a unos 190 kilómetros al norte de Houston, el 12 de mayo provocó uno de los mayores esfuerzos de búsqueda de un recluso fugado en la historia de Texas, según las autoridades.

López estaba en la lista de los 10 fugitivos más buscados del estado y las autoridades ofrecieron hasta US$ 50.000 por información que ayudara a capturarlo.

«Tiene cadena perpetua por un asesinato capital, donde mató a un hombre con un pico y también recibió una condena por intento de asesinato capital por dispararle un arma a un agente de policía», dijo el portavoz del Departamento de Justicia Criminal de Texas, Robert Hurst, durante un conferencia de prensa en ese momento, advirtiendo que López es «muy peligroso».

Gonzalo López en una imagen sin fecha

López estaba afiliado a la pandilla conocida como Mexican Mafia y tenía vínculos con el área del Valle del Río Grande, incluidos Weslaco y Mercedes, y San Antonio, dijo el departamento de seguridad pública del estado.

La familia estaba visitando su residencia de fin de semana cuando fueron asesinados

Más temprano el jueves, las autoridades dijeron que una familia había sido encontrada muerta en su casa rural y que López era el sospechoso.

«López es obviamente un asesino. No le importa la vida humana», dijo Clark.

Las autoridades no proporcionaron las edades exactas ni las identidades de las víctimas.

Clark dijo que la familia estaba usando la casa en el condado de Leon como una «residencia de fin de semana». Los investigadores creen que la familia no tenía conexión con López, quien supuestamente irrumpió en la casa y robó un vehículo que Clark describió como un «camión agrícola».

La casa estaba dentro del perímetro que la policía estaba buscando después de la fuga de López, que ocurrió cuando lo transportaban de una instalación en Gatesville a otra unidad en Huntsville para una cita médica.

Huntsville está a unos 110 kilómetros al norte de Houston.

Estaba siendo conducido en un área separada y enjaulada del autobús de la prisión, pero pudo escapar de sus ataduras, cortar el metal y salir del fondo de la jaula, dijeron las autoridades anteriormente.

López atacó al conductor y obligó al autobús a detenerse, dijeron las autoridades. Los dos salieron del vehículo y cuando un segundo agente comenzó a acercarse, López regresó al autobús e intentó conducirlo, pero los agentes dispararon a las llantas y pudieron detener el vehículo, dijeron las autoridades.

López salió del autobús y corrió hacia el bosque a la salida de la autopista 7 en el condado de Leon, según las autoridades.

Raja Razek y Chuck Johnston de CNN contribuyeron a este informe.