El misterioso avión espacial chino regresó a la Tierra el pasado 6 de septiembre después de pasar más de ocho meses en órbita. Esta aeronave se lanzó el 14 de diciembre de 2023 desde el Centro de Lanzamiento de Satélites de Jiuquan (China) a bordo de un cohete Long March 2F y, tras estar 268 días en órbita, aterrizó en el mismo sitio de lanzamiento.
Durante la operación en órbita, el objetivo fue capaz de realizar «verificaciones de tecnologías reutilizables y experimentos científicos espaciales para brindar apoyo técnico para el uso pacífico del espacio», informó la agencia oficial Xinhua en un comunicado. No obstante, aunque las capacidades exactas del avión espacial siguen siendo en gran parte desconocidas, Xinhua afirma que la nave «allanará el camino para métodos de viaje de ida y vuelta más convenientes y asequibles».
Por otro lado, como se vio en misiones anteriores, los rastreadores de la nave espacial en tierra observaron que el avión soltaba un pequeño objeto en órbita. Y, ante este hecho, el astrónomo Jonathan McDowell del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian compartió en una publicación en la red social X (antes Twitter) que «este objeto podría ser el despliegue de un subsatélite, o podría ser una pieza de hardware expulsada antes del final de la misión y la desorbitación».
A new object (59884/2023-195G) has been cataloged associated with the Chinese CSSHQ spaceplane in a 602 x 608 km x 50.0 deg orbit. It seems to have been ejected about 1900 UTC May 24.
— Jonathan McDowell (@planet4589) May 26, 2024
¿Hay alguna relación con el objeto en órbita?
Según el diario especializado SpaceNews, el avión espacial realizó operaciones de encuentro y proximidad (RPO, por sus siglas en inglés) con el objeto mencionado, lo que significa que probó las capacidades para encontrarse y acercarse a él en el espacio.
Además, estas operaciones se pueden utilizar para reparar o realizar tareas de mantenimiento en «satélites amigos», asimismo, se cree que «las superpotencias militares están perfeccionando estas técnicas para manipular potencialmente los satélites adversarios durante cualquier combate orbital futuro».
Este avión ya colocó otros objetos misterios
En diciembre del año pasado, dicho avión también ‘colocó’ seis objetos misteriosos en la órbita. Estos elementos, que emitieron diversas señales, fueron identificados como OBJETO A, B, C, D, E y F por el Departamento de Defensa de Estados Unidos.