El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas llevará a cabo este martes 22 de octubre una sesión informativa abierta sobre la crisis en Haití, seguida de consultas privadas. Durante esta reunión, María Isabel Salvador, representante especial y jefa de la Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH), presentará un informe sobre los acontecimientos recientes, además del último informe del Secretario General, distribuido el 15 de octubre.
Uno de los temas centrales será la situación política en Haití. El país está trabajando para establecer mecanismos de gobernanza de transición con el fin de celebrar elecciones y juramentar a un nuevo presidente en febrero de 2026, de acuerdo con un acuerdo político facilitado por la Comunidad del Caribe (Caricom) en marzo.
De acuerdo a un informe del Security Council Report, el Consejo Presidencial de Transición (CTP) anunció la nominación de siete de los nueve miembros del Consejo Electoral Provisional, que se encargará de preparar el camino hacia las elecciones. Sin embargo, los puestos restantes están reservados para representantes de grupos de derechos humanos y de mujeres, quienes aún no han llegado a un consenso.
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El documento expresa que la situación se ha complicado por acusaciones de corrupción contra tres miembros del CPT, quienes supuestamente intentaron sobornar al presidente del Banco Nacional de Crédito de Haití. Esto ha llevado a la Unidad Anticorrupción a solicitar cargos penales. A pesar de que la mayoría de los miembros del CPT firmaron una resolución excluyendo a los acusados de la presidencia, estos todavía permanecen en el consejo. El diputado Leslie Voltaire, ajeno al escándalo, asumió la presidencia rotativa el 7 de octubre.
Lucha contra pandillas
“En el ámbito de la seguridad, Haití enfrenta una situación alarmante. La violencia de pandillas ha aumentado en Puerto Príncipe, donde estos grupos han consolidado su control sobre barrios estratégicos, generando ingresos a través de extorsiones y contrabando”, declara el documento. Según el informe del Secretario General, se registraron 1,441 asesinatos entre junio y agosto, un aumento considerable respecto al año anterior. El ataque del 3 de octubre por la pandilla «Gran Grif» en Pont-Sondé dejó al menos 100 civiles muertos, evidenciando la gravedad del problema.
La Policía Nacional de Haití (PNH) ha lanzado operaciones antipandillas con el respaldo de una misión de apoyo multinacional autorizada por el Consejo de Seguridad y liderada por Kenia. Aunque estas operaciones han logrado liberar algunas áreas del control de las pandillas, las fuerzas de seguridad enfrentan desafíos significativos, incluida la falta de personal y recursos financieros. Actualmente, la misión multinacional cuenta con alrededor de 400 agentes de policía, muy por debajo del total proyectado de 2,500.
El informe del Secretario General también destaca los esfuerzos por fortalecer la coordinación entre las Naciones Unidas y la misión multinacional. Se ha establecido un mecanismo de coordinación policial, así como un procedimiento operativo estándar para garantizar el respeto a los derechos humanos en las operaciones de seguridad. Sin embargo, se necesita un apoyo financiero urgente para que la misión multinacional pueda operar efectivamente y cumplir su mandato.
La direcora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, informará sobre la crisis alimentaria en el país, donde casi el 48 % de la población enfrenta inseguridad alimentaria aguda. El número de desplazados internos ha aumentado un 22 % en los últimos meses, superando los 700,000, con los niños representando más de la mitad de los desplazados.
Además, el informe resalta los abusos y violaciones de derechos humanos, incluyendo asesinatos y secuestros. Aunque ha habido una disminución en ciertos barrios de Puerto Príncipe, la situación ha empeorado en áreas cercanas controladas por pandillas, donde se han cometido brutalidades extremas.
situación compleja
Durante la sesión informativa, se espera que los miembros del Consejo hagan hincapié en la necesidad de acelerar la transición política y restaurar la gobernanza democrática en Haití. También se anticipa que se expresen preocupaciones sobre la situación de seguridad, en particular en relación con la masacre en Pont-Sondé.
En resumen, la situación en Haití es compleja y requiere atención urgente. Los desafíos políticos, de seguridad y humanitarios están interrelacionados y demandan una respuesta coordinada. La sesión del Consejo de Seguridad servirá como una plataforma para discutir estos temas críticos y buscar soluciones que ayuden a restaurar la paz y la estabilidad en el país.