Al inicio de su séptima temporada como un Blue Jays, Vladimir Guerrero Jr., se ubica en el puesto 16 en la historia del equipo en victoria sobre jugador reemplazo (WAR) con 21.7 detrás del inmortal Roberto Alomar (22.3), un listado que encabeza el exlanzador Dave Stieb (56.8).
El inicialista nacido en Montreal ahora tiene el camino abierto para cuando culmine su contrato dentro de tres lustros haber triturado las principales marcas del club canadiense.
Los 500 millones de dólares que devengará entre 2026 y 2039 se los permitirán. Es el precio que podría pagar el equipo nacido en 1976 para tener un jugador genuino, formado en su finca y con una larga carrera.
Los que pudieron…
Carlos Delgado quería quedarse, pero los Rogers (dueños de la franquicia) decidieron que no podían costearlo y nunca le hicieron una oferta seria cuando se convirtió en agente libre en 2004. Se fue por un año a Florida antes de jugar sus últimas cuatro temporadas con los Mets.
Roy Halladay, Dave Stieb y Pat Hentgen regresaron para terminar sus carreras con los Jays; Halladay con un contrato ceremonial de un día, pero todos pasaron tiempo con otros equipos antes de regresar a casa.
Tony Fernández se fue tres veces, pero siempre regresaba.
Vernon Wells fue traspasado tras brillar con el equipo durante una década, y ¿quién puede olvidar ver a Lloyd Moseby con el uniforme de los Tigres, a Jesse Barfield con los Yankees y a George Bell con los Cachorros? Incluso Willie Upshaw jugó una última temporada en otro equipo, en Cleveland.
Otros jugadores de los Jays de todos los tiempos (“jugadores de legado”, en palabras de Mark Shapiro), como José Bautista, Edwin Encarnación, Josh Donaldson y los héroes de la época dorada Joe Carter, Alomar, Devon White y Tom Henke, comenzaron y terminaron sus carreras con otras organizaciones.
Duane Ward quizás fue el que más cerca estuvo de ser un Jay significativo para siempre, pero el poseedor del récord de salvamentos del equipo en una sola temporada (45 en 1993) hizo sus primeras 10 apariciones con Atlanta.
Vladdy, sin embargo, puede estar para quedarse. A menos que decida dar una vuelta de la victoria, quizás con uno de los antiguos equipos de su padre, como los Angels o Rangers, a los 41 años en 2040. Quizás los Expos regresen para entonces.
En sus últimas cuatro temporadas completas en las Grandes Ligas, hasta este año, Vladdy ha promediado 34 jonrones. Si mantiene ese nivel de producción, conectará su jonrón número 500 cerca del final del curso 2034, con cinco años restantes de contrato.
El único jugador en conectar su jonrón número 500 con el uniforme de los Jays fue Frank Thomas, y Toronto fue solo una parada en su carrera de Salón de la Fama.
Si Guerrero mantiene su ritmo de 180 hits por temporada, alcanzará su hit número 3000 alrededor de agosto de 2037, con más de dos años restantes de contrato. Nadie ha logrado esa hazaña con el uniforme de Toronto.
Los Jays celebraron su aniversario 48 el lunes. Después de casi medio siglo, por fin tienen un ícono que nunca ha vestido ni vestirá otro uniforme.
Costará 500 millones de dólares, pero en Canadá entienden que valdrá la pena.
Casillas internas a perseguir
El primera base de 26 años de edad tiene el camino abierto para ser el mejor jugador de la historia en la organización, y se proyecta a ser líder histórico de las más importantes categorías ofensivas.
Los puertorriqueños Carlos Delgado y Alomar, y el dominicano Tony Fernández son los jugadores más emblemáticos en la historia de la organización y lideran las principales categorías ofensivas del equipo.
Delgado es líder en carreras anotadas (889), dobles (343), cuadrangulares (336), careras empujadas (1,058), bases por bolas (827), slugging (.556) y OPS (.948).
Fernández encabeza en juegos jugados (1,450), hits conectados (1,583) y triples (72), y Alomar es líder de bateo y pieza clave de los últimos dos campeonatos obtenidos por el equipo en 1992 y 1993. Todo al alcance.