La expresidenta argentina Cristina Fernández denunció provocación policial por el vallado de la vivienda en la que cumple prisión domiciliaria y solicitó a partidarios evitar el lugar donde cientos de personas le llevan mensajes de solidaridad.
Condenada a seis años e inhabilitación política perpetua por administración fraudulenta, Fernández es la principal líder de la oposición al presidente ultraliberal Javier Milei.
Su condena, que cumple desde el martes, fue ratificada días después de que la líder peronista de centroizquierda anunciara su candidatura a legisladora provincial.
El domicilio en la capital argentina donde la dos veces presidenta (2007-2015) y vice (2019-2023) cumple prisión se convirtió en el centro de manifestaciones de solidaridad, pero también de resistencia a las políticas de Milei, de las cuales Kirchner es una crítica acérrima.
Mensaje en redes sociales
Ante el operativo policial, la exmandataria pidió a través de sus redes sociales a sus partidarios trasladar a una plaza un acto previsto frente a su casa.
Tras el pedido, cientos de manifestantes con banderas argentinas se concentraron en Parque Lezama, cercano a la vivienda de Kirchner, adonde escucharon su voz en un mensaje grabado.
- «Este modelo es insostenible, tarde o temprano se cae (…) podrán mandar policías, pero la gente quiere comer y tener futuro», dijo.
También consideró «trucho» (falso) el superávit fiscal, uno de los pilares del plan económico del gobierno de Milei junto con la baja de la inflación, que fue de 1,5% en mayo, la menor en cinco años.
«Si desfinancian la ciencia, la salud, la educación y no construyen una sola obra pública, cualquiera tiene superávit», argumentó.
También señaló el aumento de la desocupación que en el primer trimestre de este año arrojó 7,9% (contra 7,7% en igual período de 2024) con picos superiores al 9% en centros industriales, la cifra más alta desde que asumió Milei.
El poder de convocatoria de la líder peronista quedó plasmado el miércoles pasado en una multitudinaria manifestación pacífica en Plaza de Mayo bajo la consigna «Argentina con Cristina» que aglutinó a centrales sindicales, movimientos sociales, estudiantiles y partidos opositores.
Autoconvocados
Este viernes, feriado por el Día de la Bandera, partidarios de Fernández se habían autoconvocado en un «banderazo por Cristina» frente a su casa.
Sin embargo, la policía levantó vallas en torno al domicilio ubicado en el barrio de Constitución, a minutos del Congreso Nacional y varios camiones policiales se apostaron en los alrededores.
«No vengan, está lleno de cabezas de tortuga«, dijo la viuda del expresidente Néstor Kirchner, aludiendo a la Infantería.
Fernández consideró que las medidas buscan «generar caos para tener protagonismo (…) y ocultar el desastre económico y social que vive nuestro país y sufre nuestro Pueblo».
Esta semana, la defensa de la exmandataria objetó ante el tribunal el régimen de visitas impuesto, limitado a familiares, médicos y abogados, cuando se especula con una eventual visita del presidente de Brasil Lula Da Silva en ocasión de participar de una cumbre del Mercosur en Buenos Aires, en julio.