Rafael Devers la volvió a sacar por segundo partido consecutivo, pero el derecho Brad Lord lanzó pelota de seis entradas y apenas una carrera, y los Nacionales de Washington vencieron 4-2 a los Gigantes de San Francisco.
Devers sigue mejorando su ofensiva con los Gigantes, ya que en sus últimos siete partidos batea para .348 (de 23-8) con tres jonrones y siete remolcadas.
El cerrador dominicano José Ferrer logró su primer salvamento de la campaña para los Nacionales luego de lanzar una entrada y dos tercios en blanco.
Las tres primeras carreras de Washington fueron jonrones: James Wood (su número 25) en el mismo primer inning, y en el tercer episodio, Paul De Jong (3) y Josh Bell (14) se fueron para la calle.
Luego en el sexto, James Wood pegó un doble al center field para impulsar a Daylen Lile y poner el juego 4-0.
Los Gigantes intentaron descontar en el mismo sexto inning con el jonrón de Devers, y en el octavo con un elevado de sacrificio de Wilmer Flores al prado central que trajo a la goma a Heliot Ramos, pero no les alcanzó más tras la buena actuación de Ferrer en el montículo.
No pierden esperanzas
Tras su primera fecha límite como presidente de operaciones de béisbol de los Gigantes, Buster Posey insistió en que no abandona las esperanzas de un puesto en los playoffs a pesar de ser vendedores.
Los Gigantes de San Francisco cambiaron al cerrador Camilo Doval a los Yankees de Nueva York y al jardinero Mike Yastrzemski a los Reales de Kansas City antes de la fecha límite de cambios. Los Gigantes recibieron prospectos a cambio de ambos jugadores, marcando una inesperada reestructuración del equipo, que recibió desde Boston a Devers.
Posey y el dirigente BobMelvin han expresado optimismo sobre sus jugadores consolidados, en el sentido de que son lo suficientemente buenos como para combinarse con los jóvenes recién llegados e intentar una carrera improbable por el último puesto de comodín de la Liga Nacional.
San Francisco está a 4.5 juegos de ese lugar, que ocupan hoy los Mets de Nueva York.