El juez instructor del proceso por golpismo contra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro, el magistrado Alexandre de Moraes, le solicitó este jueves a la Corte Suprema que defina una fecha para iniciar la audiencia final del juicio contra el líder ultraderechista.
La petición fue realizada en una notificación dirigida al presidente de la Primera Sala del Supremo Tribunal Federal (STF), magistrado Cristiano Zanin, en la que el instructor afirmó que el proceso contra los ocho principales acusados, incluyendo a Bolsonaro (2019-2022), está listo para su fase final.
«Considerando la regular conclusión de la instrucción procesal, el cumplimiento de todas las diligencias complementarias admitidas y la presentación de los alegatos finales de la Fiscalía y de todos los acusados, solicito que se defina fecha para el juicio presencial del proceso penal«, afirmó De Moraes en su notificación.
La petición de De Moraes reafirmó las expectativas de que el juicio a Bolsonaro, en el que el líder ultraderechista puede ser condenado a unos 40 años de prisión de ser considerado culpable, sea programado para septiembre próximo.
De Moraes solicitó la definición de la fecha del juicio un día después de que los ocho principales acusados presentaran sus alegatos finales en un proceso en que son imputados de los delitos de golpe de Estado, intento de abolición del Estado Democrático de Derecho, asociación armada para delinquir, daño calificado al patrimonio público y deterioro del patrimonio público.
En los alegatos finales, la defensa del expresidente solicitó su absolución por falta de pruebas, negó su participación en un complot golpista y dijo que las acusaciones en su contra son absurdas.
«No hay cómo condenar a Jair Bolsonaro con base en las pruebas producidas en los autos, que demostraron que él determinó la transición (de Gobierno), evitó el caos con (las protestas de) los camioneros y le dijo a sus electores que el mundo no acabaría el 31 de diciembre (con el fin de su Gobierno)», aseguran los abogados.
- El exmandatario y militar retirado es acusado de haber liderado un complot con militares y altos funcionarios de su Gobierno para intentar evitar la investidura del progresista Luiz Inácio Lula da Silva, quien lo derrotó en las elecciones presidenciales de 2022.
La defensa también solicitó, por inconsistencias y contradicciones, la anulación del acuerdo de cooperación judicial que la Fiscalía le ofreció al antiguo edecán de Bolsonaro, el teniente coronel Mauro Cid, por el que el excolaborador admitió su culpa y denunció a sus supuestos cómplices a cambio de una reducción de la condena.
Testimonio de Cid
El testimonio de Mauro Cid, en el que dijo haber participado en reuniones en la Presidencia en las que se analizó un proyecto de decreto para anular las elecciones y declarar el estado de sitio, es considerado como la principal prueba contra Bolsonaro.
Además de Bolsonaro y de Mauro Cid, los principales acusados son los exministros de la Presidencia, general de la reserva Walter Braga Netto; del Gabinete de Seguridad Institucional, general de la reserva Augusto Heleno Ribeiro; de Defensa, general Paulo Sergio Nogueira, y de Justicia, Anderson Torres.
El único que espera el juicio en prisión es Braga Netto, quien fue candidato a vicepresidente en la fórmula liderada por Bolsonaro, mientras que el exmandatario se encuentra en prisión domiciliaria.
La prisión en una residencia fue determinada por De Moraes hace dos semanas, luego de que Bolsonaro violara diferentes restricciones que le había impuesto, como la de no enviar mensajes por sus redes sociales o por las de terceros.