La derrota de Saúl “Canelo” Álvarez ante Terence “Bud” Crawford no solo le costó al mexicano sus cinturones de campeón unificado de los supermedianos, también abrió la puerta para que Óscar de la Hoya, su antiguo promotor y viejo rival mediático, aprovechara el momento para burlarse públicamente.
De la Hoya, retirado del ring pero muy activo en redes sociales, publicó un video en Instagram usando una camiseta con la frase en inglés “Eat more meat” (“Come más carne”), en alusión al caso de dopaje que involucró a Canelo hace unos años. En el mismo clip, el “Golden Boy” lanzó un mensaje sarcástico: “¡Te dije!… idiotas”, en referencia a lo que, según él, siempre advirtió sobre el desempeño del pugilista tapatío.
“¿Qué acabas de ver? Solo hablo de los hechos”, agregó De la Hoya en tono desafiante, mientras miles de seguidores reaccionaban al contenido.
Viejas heridas reabiertas
El enfrentamiento verbal entre ambos no es nuevo. La relación profesional se rompió en 2020, cuando Canelo decidió terminar su contrato con Golden Boy Promotions alegando falta de transparencia y disputas sobre el manejo de su carrera y los ingresos de sus peleas. Desde entonces, las declaraciones cruzadas no han cesado.
Mientras Canelo aseguró que perdió la confianza en De la Hoya, el exboxeador lo calificó de desagradecido y cuestionó su actitud después de alcanzar la cima del boxeo mundial.
Las diferencias se agudizaron con las negociaciones en torno a la plataforma DAZN y el control de las peleas, lo que marcó el final de una relación que duró casi una década.
El contexto de la derrota
La pelea ante Crawford fue cerrada, pero los jueces dieron la victoria unánime al estadounidense con tarjetas de 116-112, 115-113 y 115-113, proclamándolo nuevo campeón indiscutido de las 168 libras. Para Canelo, la derrota representa un golpe a su legado; para De la Hoya, una oportunidad de reivindicar sus críticas.
Mientras Canelo aseguró después del combate que se sentía “muy orgulloso” de su desempeño pese al revés, De la Hoya lo utilizó para recordarle al mundo que, según él, “siempre tuvo razón”.