Mayelin Peralta preparaba la tarde del sábado la cena y un jugo que había comprado dos horas antes, cuando recibió la noticia de que un hombre se había llevado a Yostín Peralta, su hijo de 10 años, con quien vivía en el barrio Puerto Rico de Los Mina, en Santo Domingo Este.
Al principio creyó que el niño, quien tenía una condición especial, estaba jugando con sus amigos. Pero al enterarse de lo ocurrido, dejó la cena y salió a alertar a los vecinos, que iniciaron de inmediato la búsqueda. Uno de ellos vio a un hombre que lo llevaba con un helado en la mano y pensó que era un pariente.
Más tarde se confirmó que quien lo conducía era José Antonio Glass, un supuesto pedófilo que había cumplido 15 de sus 57 años de prisión por abusar sexualmente en 2009 de un menor de 15 años, según informó la Policía.
Por su condición, Yostín —que cumpliría 11 años el próximo 23 de octubre— era muy querido en el sector. “Todo el mundo lo cuidaba… yo siempre andaba con mi hijo a todos lados”, expresó su madre, de 30 años.
Luego del crimen volvió al sector
Cerca de las 9:00 de la noche, casi tres horas después del rapto, y tras supuestamente consumar el crimen, Glass regresó al sector y se acercó a la esquina próxima a la vivienda, como si nada hubiera ocurrido. Para su desgracia, alguien lo reconoció como la persona que llevaba al menor horas antes.
Le preguntaron dónde estaba el pequeño, pero él se negaba a contestar. Además de los testigos, varias cámaras confirmaron que era él con quien iba. La multitud lo entregó a las autoridades, confirmó una pariente.
El hallazgo
La búsqueda continuó y, lamentablemente, a la 1:00 de la tarde del domingo, la Policía halló el cuerpo de Yostín en una zona boscosa del sector Los Pinos de Sabana Perdida, municipio Santo Domingo Norte.
Médico legista dice fue abusado sexualmente
El informe de la Subdirección de Investigaciones Criminales (Dicrim) señaló traumas en el cuello del menor. Mientras, el levantamiento del médico legista actuante indicó un hecho aún más atroz: «Los golpes que presenta el hoy occiso se lo ocasionó el detenido José Antonio Glass (Yoyon), momento que abusaba sexualmente del menor, y al este resistirse le ocasiona los golpes que le produjeron la muerte, y luego abusa sexualmente del hoy occiso».
La Policía Científica recolectó una bola de baloncesto con la que jugaba el niño, un pantalón rojo, unas chancletas negras, un bolígrafo y unos pantaloncillos multicolor.
El cuerpo del infante permanece en el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) y sería entregado este lunes a los parientes.
“Cuidado si dice que está loco”
La noche del domingo, familiares y vecinos lamentaban la tragedia. Su madre, Mayelin Peralta, clamó justicia.
Saira Feliz, tía de la víctima, pidió a las autoridades que no permitan que Glass sea enjuiciado como una persona con problemas de salud mental. “Él no está loco, sabe muy bien lo que hizo… es un violador, un maniático”.
En la misma línea, otro vecino indignado expresó: “Lo que queremos es justicia, ese niño era muy querido aquí en el barrio”.
De acuerdo con los residentes, el hombre había salido de prisión hacía pocos meses y llevaba alrededor de tres meses viviendo en la zona. Será presentado en las próximas horas ante la Fiscalía de Atención Permanente de Santo Domingo Este para el conocimiento de la medida de coerción.
En un comunicado de prensa, la Policía y el Ministerio Público expresaron su solidaridad con los familiares de la víctima, “a la vez que reiteraron su compromiso de llevar ante la justicia a todo aquel que atente contra la vida, la integridad y la seguridad de los niños, niñas y adolescentes”.