La carga rápida de este Realme GT Neo 3 es su carta de presentación, pues nos ofrece una velocidad que alcanza los 150 W. Pero además de eso, este smartphone cuenta con una ficha técnica con otros puntos fuertes por los que debemos tenerlo muy presente al comprar un nuevo teléfono.
Por el momento, este smartphone ha sido presentado en China, aunque esperamos que antes o después termine aterrizando en España y podamos comprarlo fácilmente. Su precio en el país asiático se sitúa en los 287 euros al cambio, para la versión más económica, y llega a los 415 euros en su versión mejor equipada, tanto por memoria como por la carga.
Motivos para comprarlo no faltan
Lo primero que gusta de este teléfono es su diseño, ya que Realme suele hacer un buen trabajo en este aspecto y con el nuevo modelo no ha defraudado. Con una estética basada en coches de carreras, consigue levantar pasiones entre los más atrevidos. Se puede comprar en colores blanco, azul y en negro, aunque este último no incorpora un diseño especial.
Un terminal que no se hace pesado gracias a los 188 gramos, aunque si es grande. Está fabricado sobre todo en policarbonato, lo que le permite disipar bien el calor y que tenga un buen tacto en mano, perfecto para llevarlo sin funda.
Su pantalla se muestra con una de las mejores en lo que se refiere a calidad precio, gracias a que se trata de un panel AMOLED con 6,7 pulgadas, lo que hace que se recomiende sobre todo para los que quieren consumir mucho contenido y no les importe llevar un gran terminal en el bolsillo. En su parte frontal el diseño se completa con una pequeña cámara frontal en forma de agujero centrado.
Lo que no falla es la imagen, pues contamos con resolución Full HD +, así como una tasa de refresco de 120 Hz y una importante tasa de muestreo de 1000 Hz, lo que nos permitirá ver como casi antes de tocar la pantalla reacciona sin pensárselo. Esto puede ser un punto diferenciador si queremos jugar con el teléfono. Además, tenemos mucho color, pues nos os ofrece 10 bits, permitiendo que tengamos una amplia paleta de tonalidades al ver redes sociales, vídeos de YouTube o películas, con negros puros.
Su rendimiento es otro de los elementos que nos hacen valorar positivamente el dispositivo, pues con el procesador MediaTek Dimensity 8100, nos asegura que vamos a poder mover todo sin dificultades. Se trata de un chip que además incorpora 5G al teléfono de Realme y con el que las aplicaciones se abren al instante.
Cuando llega la hora de jugar, la refrigeración líquida saca a pasear su destreza y consigue mantener al smartphone fresco. Además, se ayuda del Modo GT 3.0, lo que detiene otros procesos innecesarios para centrar todo su potencial en él y que no suframos caída de fotogramas o perdamos una partida por una mala respuesta del terminal.
Tiene una extensa variedad de opciones que van desde los 6 GB de RAM y 128 GB, hasta los 12 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento, los que además se puede ampliar con una tarjeta MicroSD. De este modo vamos a poder descargar todo lo que queramos y almacenar fotos por mucho tiempo.
En cuanto al software, Realme UI 3.0 llega a bordo de este móvil, junto con Android 12. Esto nos permite tener mucha protección, una estética moderna y personalizable, además de una integración total con otros dispositivos Android.
No le falta nada en conectividad como NFC o GPS, tiene todas las tecnologías y además un motor de vibración que nos permite vivir la experiencia más realista cuando estamos jugando con el teléfono. Esto lo convierte prácticamente en un terminal gaming.
Pero si por algo hay muchos que miran a este móvil con envidia es por la velocidad de carga. Debemos saber que se puede encontrar en dos opciones, una con 80 W de potencia, la que es más limitada. Pero, además, hay una versión con 150 W, con la que vamos a poder cargar el teléfono al 50% en tan solo 5 minutos. Esto nos permite olvidarnos de cargarlo solamente por la noche, pues en lo que tardamos en preparar el desayuno, lo tendremos listo para todo el día.
En sus celdas nos topamos con 4.500 mAh para la versión más veloz y 5.000 mAh para el modelo de menor velocidad. Tendremos que escoger cuál de los dos está hecho para nosotros en función del uso que solemos hacer de la carga.
Razones para descartarlo
Entre los puntos que menos convence del Realme GT Neo 3 está la cámara, que, aunque en ciertas situaciones lumínicas que nos acompañen podrá obtener buenas fotos, no tiene la versatilidad deseada. Su lente de 50 Mpx es la mejor de todas, con una apertura f. 1.88 que nos ofrece buenas imágenes y coloridas. Sin embargo, no es lo suficientemente capaz de contentarnos al caer la noche, a pesar de que el modo avanzado de Realme trata de ayudarnos.
También hay que aplaudir que este tiene estabilización óptica de imagen, permitiendo que grabemos sin problemas las escenas, incluso en resoluciones 4K. Las demás cámaras son el ultra gran angular con 8 Mpx y una lente macro de 2 Mpx, pequeños elementos añadidos que nos hacen echar en falta el teleobjetivo. En su parte delantera la cámara selfie tiene 16 Mpx, lo que es ideal para conseguir fotos de nosotros mismos. Todas estas lentes se ayudan de la IA, que pone en funcionamiento el HDR para levantar los colores y deshacer los fallos de cámara.
Un punto que nos gustaría ver en este móvil y que, sin embargo, no está presente, es la resistencia al agua y al polvo, que no existe ni tan siquiera por mínima que sea. Al menos sí que contamos con Jack de audio, Bluetooth y desbloqueo con huella dactilar en pantalla.
Su precio determina la decisión final
Una vez que este teléfono llegue a España y sepamos cuál es el precio final por el que podemos conseguirlo con los impuestos añadidos, llegará el momento de decirnos por elegirlo o no. Hasta el momento, teniendo en cuenta todo lo que tiene a bordo y partiendo por debajo de los 300 euros, sin duda alguna es una compra que recomendamos a cualquier persona.
Tan solamente vamos a poder sacarle pegas a la cámara si somos expertos en la materia, aunque para subir contenido a redes sociales será suficiente. Todo lo demás es sencillamente sensacional.