Un hombre de Jacksonville, Florida, se resignó a perder el bebé que nació el día que su esposa partió de este mundo.
“Mi milagro es sostener a mi hijo por tantos momentos preciosos como sea posible y cuando llegue el momento, alzarlo hacia su mamá para que pueda retenerlo por primera vez en el paraíso”, escribió Matthew Accurso en sus redes sociales.
El niño ha estado en la unidad de cuidados intensivos para recién nacidos desde que su madre Lauren Accurso falleciera a los 37 años por una extraña complicación en el parto.
El bebé había dado señales de mejoría, pero el último mensaje del padre indica que se agotaron las posibilidades.