Estados Unidos ha atacado más de 800 objetivos en Yemen desde mediados de marzo y matado a cientos de rebeldes hutíes, incluidos miembros de la dirección del grupo, informó este domingo el ejército.
Las fuerzas estadounidenses han bombardeado a los hutíes casi a diario desde el 15 de marzo en una operación denominada «Rough Rider«, con el objetivo de poner fin a sus ataques a buques en el mar Rojo y el golfo de Adén, una ruta marítima clave.
«El Centcom ha atacado más de 800 objetivos. Estos ataques han matado a cientos de combatientes y numerosos líderes hutíes«, afirmó en un comunicado ese mando militar que opera en Oriente Medio.
«Los ataques han destruido múltiples instalaciones de mando y control, sistemas de defensa aérea, instalaciones de fabricación de armas avanzadas y lugares de almacenamiento de armas avanzadas», añadió el Centcom.
A pesar de la ofensiva, los hutíes, que controlan grandes extensiones de Yemen y están en guerra desde 2015 con una coalición liderada por Arabia Saudí, siguen reivindicando ataques contra buques estadounidenses e israelíes.
Los rebeldes comenzaron su asedio a los barcos a finales de 2023 en «solidaridad» con los palestinos de la Franja de Gaza, devastada por la guerra entre Israel y el grupo islamista Hamás.
Los ataques hutíes han impedido el paso por el canal de Suez, una ruta vital que normalmente transporta alrededor del 12 % del comercio marítimo mundial, lo que ha obligado a muchas empresas a realizar un costoso desvío por el extremo sur de África.
«Aunque los hutíes han seguido atacando nuestros buques, nuestras operaciones han reducido el ritmo y la eficacia de sus ataques. Los lanzamientos de misiles balísticos han disminuido en un 69 %», añadió el ejército estadounidense.
«Sin duda, Irán sigue prestando apoyo a los hutíes. Los hutíes solo pueden seguir atacando a nuestras fuerzas con el respaldo del régimen iraní», denunció el mando militar.