República Dominicana inició el viernes la construcción de la segunda fase del muro fronterizo con Haití, que comenzó en 2021 bajo el argumento de combatir la migración ilegal y la violencia que azota a ese país.
La verja perimetral se extiende 13 km en la provincia de Dajabón (norte) y cubrirá unos 170 de los 340 km de extensión de la frontera.
– Soberanía reforzada –
Los ministros de la Presidencia y de Defensa encabezaron el acto del «primer palazo» para marcar «el inicio de la construcción«, según un comunicado del gobierno.
La estructura -una base de concreto y, el resto, una verja con alambres en el tope- es una bandera del gobierno del presidente Luis Abinader, que desde su llegada al poder impulsó masivas redadas y deportaciones de indocumentados haitianos –más de 140.000, entre enero y mayo de 2025.
«La verja perimetral no solo es una infraestructura de seguridad, sino también un símbolo de soberanía«, dijo en el acto el ministro de la Presidencia José Ignacio Paliza. «No hay mejor muro que la integridad del dominicano».
Abinader no asistió al evento.
Haití, el país más pobre de América, sufre desde hace tiempo la violencia de bandas criminales, acusadas de asesinatos, violaciones, saqueos y secuestros, en un contexto de inestabilidad política.
Esta violencia se ha intensificado en el último año, provocando el desplazamiento de un millón de personas.