(CNN Español) — Bajo una fuerte custodia de agentes de la Policía de Ecuador y en un avión militar, cinco cabecillas de bandas delictivas fueron trasladados desde Cuenca a Guayaquil tras el sangriento motín carcelario en la cárcel de Turi que dejó 20 reclusos muertos.

El Ministerio de Gobierno confirmó la noche de este lunes que la operación de traslado desde el Centro de Privación de Libertad Azuay N.° 1 en Turi hacia el Centro de Privación de Libertad “La Roca” en Guayaquil incluyó a cinco cabecillas “involucrados directamente” en los hechos violentos del domingo.

Según el ministro del Interior, Patricio Carillo, estos reclusos “son líderes o brazos principales de organizaciones criminales” y aseguró que la decisión de movilizarlos a otra cárcel evitará la interacción con las bases de las organizaciones que representan.

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Carrillo insistió en que se busca frenar la espiral de la muerte en el sistema penitenciario.

“Organizaciones mafiosas lideradas por poderosos intereses criminales han hundido la moral ciudadana”, agregó el ministro Carrillo.

El presidente Guillermo Lasso indicó que se está actuando de forma firme e inmediata tras lo ocurrido el domingo en la cárcel de Turi.

“Con esta decisión se evitará cualquier tipo de interacción entre estos cabecillas y las bases de las organizaciones que representan. Implementamos mano dura a quienes pretenden menoscabar la seguridad de los ecuatorianos, a la vez que damos dignidad y atención a las demás personas privadas de libertad”, enfatizó Lasso en su cuenta de Twitter.

Tras el sangriento amotinamiento del domingo en la cárcel de Turi, el departamento de Criminalística trabaja en la entrega de los 20 cuerpos de los reclusos muertos a los familiares. Algunos de los cuerpos sufrieron mutilaciones, de acuerdo con el reporte de la Policía.