El humorista Félix Peña, exintegrante del espacio «La opción de la 12», fue sometido a un delicado proceso quirúrgico tras presentar un fuerte dolor de estómago producto de una obstrucción intestinal. La información la dieron a conocer su hijo, Gabriel Peña y su sobrino, Monchy Capellán, quienes también explicaron que el proceso se complicó tras explotarle el apéndice.

Los familiares del humorista, conocido como «La Tata«, aseguraron que, aunque se encuentra en cuidados intensivos está en un proceso de recuperación, pues los médicos lograron corregir la situación.

«Fue ingresado el jueves 7 de abril y ahí dura tres horas en el centro de salud. La operación por obstrucción intestinal se le realizó, pero buscando se dan cuenta que hay infección y luego encuentran el apéndice explotada dentro de él», señaló su sobrino. Luego de ahí continúa «el proceso es limpiar el área, el doctor el dice que es una operación grave, de alto riesgo. Ahí se le limpia y sella el área».

 «Él se lamentó diciendo ‘wow me fueron a operar por una cosa y ahora me explota el apéndice'», revela el hijo del humorista que le señaló su padre, y agregó: «estoy agradecido porque el médico dijo que de los pacientes a los que le explota el apéndice muy pocos sobreviven».

«Estoy agradecido con los doctores que lograron salvarle la vida a mi padre». Señaló que decidieron subir el audiovisual al canal del YouTube del humorista por petición de él, quien se encuentra en recuperación. 

A continuación, el video completo donde explican la situación del humorista.

El apéndice es un tubo sin salida (cerrado en un extremo) de tejido adosado al intestino grueso, en la parte inferior derecha del abdomen. Cuando el apéndice se infecta o bloquea, se produce inflamación. Los bloqueos pueden ser causados por: materia fecal.

La apendicitis comienza con un dolor cerca del ombligo, que luego se traslada al lateral derecho. Suele estar acompañado de náuseas, vómitos, pérdida del apetito, fiebre y escalofríos.La apendicitis suele tratarse con cirugía y antibióticos. Si no se trata, el apéndice puede reventarse y causar un absceso o una infección sistémica (sepsis).