Cinco policías resultaron heridos y otro desaparecido en un ataque armado en la localidad de Kenscoff en Haití, por parte de pandilleros que aprovecharon que los agentes abandonaron sus puestos de vigilancia para para pasar la noche en dos casas con mujeres.
Según el informe policial, los agentes no fueron atacados en sus puestos, sino en las casas donde se habían retirado para pasar la noche con mujeres.
«Estos oficiales, miembros de unidades especializadas apostadas en puntos sensibles de Kenscoff, habían abandonado sus vehículos de servicio a cierta distancia para pasar la noche en dos casas con mujeres«, admitió el vocero de la Policía, Lionel Lazare.
Según Lazare, ese momento de placer resultó ser una trampa tendida por los bandidos, relata el diario Le Nouvelliste.
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«Según las primeras informaciones, estas mujeres estaban en connivencia con los hombres armados que operaban en la zona de Kenscoff», dijo.
Bandidos se apoderaron de armas
Informados de la ausencia de los policías en sus puestos y conscientes de su ubicación exacta, los bandidos avanzaron hacia dichas casas causando heridas a los agentes, mientras que los tres vehículos de la Policía en los que viajaban los agentes, que quedaron desatendidos, fueron incendiados.
Los bandidos también se apoderaron de chalecos antibalas, pistolas, cargadores, municiones y bombas lacrimógenas.
La Inspección General de la Policía Nacional de Haití abrió una investigación para esclarecer este escándalo.