El Gobierno de Ecuador prevé que Estados Unidos instale dos bases en su territorio si se aprueba la reforma constitucional para permitir instalaciones militares extranjeras, una de las preguntas que forman parte del referéndum convocado por el presidente Daniel Noboa para este domingo.
Así lo avanzó el ministro del Interior, John Reimberg, al señalar en Radio Centro de Guayaquil que una base estará en Manta, la misma en que las fuerzas armadas estadounidenses ya estuvieron entre 1999 y 2009, y otra en Salinas.
Estos dos emplazamientos, ambos ubicados en la costa continental ecuatoriana, fueron visitados la pasada semana por la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, en su segunda visita en apenas tres meses a territorio ecuatoriano.
Reimberg detalló que una de las dos bases, sin especificar cuál, estaría manejada por el ‘Homeland Security‘ (Seguridad Nacional) de Estados Unidos, el departamento responsable de la seguridad pública, que incluye la lucha contra el terrorismo, la gestión de fronteras y la ciberseguridad, entre otros.
«Queremos atacar con todas las fuerzas a los grupos criminales (…) Trabajar en conjunto en dos bases donde nuestro personal pueda intervenir en el manejo de información es lo que necesitamos», continuó el ministro.
La intención del Gobierno solo podrá materializarse en caso de que, en el referéndum de este domingo, la mayoría de ciudadanos vote a favor de eliminar la prohibición de instalar bases extranjeras en el país, una medida impulsada por el expresidente Rafael Correa (2007-2017).
Ecuador ya contó con una base militar estadounidense en las Islas Galápagos durante la II Guerra Mundial, y luego también estuvo diez años en la de Manta hasta que los militares se vieron obligados a salir ante la entrada en vigor de la Constitución actual aprobada en 2008, durante el mandato de Correa.
Ahora, Manta cuenta con uno de los puertos más importantes del país y uno de los focos de operaciones de los grupos criminales, que desde la costa ecuatoriana envían grandes cantidades de cocaína en «narcolanchas» que parte hacia Centroamérica.
Interés de Estados Unidos
Además, reiteró el interés de EE.UU., principal aliado de Ecuador en la lucha contra el crimen organizado, en instalar ambas bases en territorio ecuatoriano, algo que quedó reflejado tras la visita de Noem, la pasada semana, donde recorrieron posibles ubicaciones para estas infraestructuras.
«¿Por qué si no vendría Noem por segunda vez de forma rápida?», preguntó irónicamente el ministro, haciendo alusión a que la secretaria también visitó Ecuador en el mes de julio y que, en este segundo viaje, la intención era conocer las ubicaciones de Manta y Salinas junto al Gobierno y las fuerzas de seguridad ecuatorianas.
De hecho, tras la visita, la propia Noem calificó a Ecuador como un socio «excelente» en la lucha contra narcotráfico, inmigración ilegal y contrabando en tierra y mar, tras concluir una visita de dos días al país andinos, la segunda en apenas tres meses.
El Gobierno de Ecuador y detractores vuelven a la Corte por otra polémica ley de Noboa
Para Reimberg, la ciudad de Salinas, el punto más saliente del Ecuador continental hacia el océano Pacífico, tiene un alto valor estratégico para combatir los delitos transnacionales.
Escalada de violencia
Ecuador atraviesa una escalada de violencia sin precedentes, atribuida al incremento de la actividad de bandas criminales organizadas, vinculadas principalmente al narcotráfico, pero que en los últimos años han incursionado con fuerza en la extorsión, los secuestros y la minería ilegal.
Desde inicios de 2024 Noboa declaró al país bajo «conflicto armado interno» y catalogó a las bandas criminales como grupos terroristas, pero la violencia se ha agudizado en 2025, ya que en el primer semestre de este año Ecuador registraron 4.619 homicidios, un 47 % más que en el mismo período de 2024.


