Según un reciente informe del diario británico The Telegraph, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, habría exigido mantener 200 millones de dólares de su patrimonio privado, amnistía para decenas de sus funcionarios y refugio en un “país amigo” como parte de un acuerdo con el gobierno de Donald Trump para renunciar y exiliarse.
El reporte asegura que la propuesta, planteada durante una llamada telefónica reciente entre ambos mandatarios, buscaba negociar una salida pactada a la crisis, a cambio de dejar el poder sin represalias.
Sin embargo, la idea fracasó ante la negativa de Washington de conceder una amnistía general, especialmente para altos mandos involucrados en acusaciones de narcotráfico, corrupción y violaciones de derechos humanos.
Claves del supuesto acuerdo
- Según fuentes citadas por The Telegraph, Maduro condicionó su salida a la conservación de 200 millones de dólares, amnistía y seguro exilio, prefiriendo un destino en el hemisferio occidental, menciones apuntan hacia Cuba, aunque EE. UU. habría sugerido China o Rusia.
- Además, planteó una amnistía amplia que alcanzara hasta 100 de sus allegados y altos funcionarios. Ese punto fue considerado inaceptable para las autoridades estadounidenses.
- La duración de la llamada habría sido breve: unos 15 minutos. En ese lapso, también se discutió la creación de un gobierno de transición y el destino del exilio.
Tras el rechazo de Washington, las tensiones no han hecho más que aumentar. La administración Trump ha reforzado su presencia militar en el Caribe y ha advertido que no descarta acciones más agresivas contra el régimen.
Al mismo tiempo, organizaciones estadounidenses responsabilizan al entorno cercano a Maduro de participar en redes como el Cartel de los Soles. Conceder una amnistía tan amplia pondría en peligro los esfuerzos de desmantelamiento de esas estructuras criminales.
¿Qué representa este episodio?
La revelación hecha por The Telegraph, y respaldada por otros medios que citan fuentes anónimas, de una oferta tan ambiciosa y al mismo tiempo tan controversial pone de relieve la crisis en la que se encuentra el régimen venezolano.
Un intento de negociación encaminado a buscar una rendición pactada y un exilio seguro, pero inasumible para Estados Unidos.
Para EE. UU., aceptar esas condiciones equivaldría a otorgar impunidad a quienes fueron señalados como responsables de delitos graves y abrir la puerta a que el narcotráfico y la corrupción queden sin castigo.


