Desde el momento en el que Klay Thompson sentenció hace algunos meses “campeonato o nada” luego del candente inicio de 18-2 de su equipo, los Warriors de Golden State parecían dispuestos a cumplir con su ambiciosa proclama.

Se requirió que Thompson finalmente estuviera saludable, luego que Draymond Green y Stephen Curry también se recuperaran de sus lesiones en la recta final, y que un reparto de jóvenes brillara en el gran escenario de la postemporada para que los Warriors nuevamente lo ganaran todo.

El coach Steve Kerr y los campeones Warriors celebraron el lunes con un desfile a través de San Francisco, con miles de fanáticos que salieron a las calles en un caluroso día de junio con una lluvia de confeti azul y oro. Esta vez, todos esos rostros nuevos también fueron parte del festejo.

Los jugadores abandonaron sus transportes para mezclarse y celebrar con los aficionados, Otto Porter Jr. y Thompson bailaban, mientras Andrew Wiggins rociaba champaña a los aficionados.

Curry lució sus otros tres anillos de campeonato en un collar.

“Tuve que sacar la joyería, ya que no la veo durante el año”, dijo Curry a NBC Sports Bay Area.

Golden State conquistó el jueves su cuarto campeonato de la NBA en los últimos ocho años al derrotar 103-90 a los Celtics de Boston juego 6. Luego, el Jugador Más Valioso de las Finales de la NBA, Curry, Thompson y Green, los tres miembros principales de cada uno de los títulos se sentaron juntos en la celebración en la que Curry abrazaba el trofeo.

Y en esta ocasión, la reacción de Thompson de “esto es una locura” resonó en todas partes. Al coronarse en calidad de visitantes, los aficionados locales finalmente tuvieron la oportunidad de celebrar con su equipo.

“Sabemos de lo que somos capaces, y estamos jugando al más alto nivel”, dijo el base Jordan Poole el sábado. “No estaríamos aquí si tuviéramos alguna duda en nosotros mismos. Cuando reúnes a muchachos que son capaces de concentrarse y trabajar como equipo, el poder y el sentimiento lo es todo, es una locura. Puedes sentir esa energía y esa vibra positiva y todos nos apoyamos unos a otros”.

Thompson regresó en enero después de más de dos años y medio de estar alejado de las canchas por una ruptura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda y de otra cirugía del tendón de Aquiles en la pierna derecha. Después cayeron lesionados Green y Curry al final de la temporada regular.

El veterano Andre Iguodala, el MVP de las Finales de 2015, quien ahora tiene 38 años, también se perdió tiempo por lesiones, pero regresó para contribuir durante la postemporada y ayudar a Golden State a regresar a lo más alto.