Algunos padres iniciaron ayer a comprar “lo más primordial” para sus hijos en víspera del nuevo año escolar 2022-2023 que comienza en septiembre y a la vez se quejaban del alto costo que tienen actualmente los libros de texto al igual que los útiles escolares.
Al visitar ayer el denominado “Paseo de la Lectura” ubicado próximo a la avenida Duarte de esta capital, los comerciantes situados allí, indicaron a un equipo de LISTIN DIARIO que el flujo de personas ha sido “pasivo”.
Marino Perez, un comprador y vendedor de libros nuevos y usados, aseguró que todos los años estos aumentan hasta cien pesos en adelante, o sea, que no es novedad el aumento aunque ahora los clientes se están quejando con más frecuencia.
“Como la economía está un poco dura ahora los clientes están gritando”, indicó añadiendo que el flujo está un poco lento.
Por otro lado, al conversar con una madre identificada como Karina, que acudió a comprar los libros de sus hijos, dijo que “está haciendo su mayor esfuerzo” porque los precios están “asequibles pero fuertes”.
Especificó que el año pasado gastó aproximadamente dos mil pesos y ayer tenía contabilizado un gasto de al menos 3,500 pesos. Explicó que asistieron al lugar porque en otros establecimientos que habían visitado estaban más caros.
“Hay que hacer su rejuego, comprarlos usados porque no se puede así”, dijo al referirse a la adquisición de algunos libros con costos elevados.
Mientras que Antonio Reynoso, un vendedor, dijo que después que anunciaron las aperturas de las clases el próximo mes, las visitas se han incrementado a medida que pasan los días. “La gente está bajando, está fluyendo…”, explicó sin más detalles.
Otro negociante identificado como Emmanuel Reyes, expresó que en comparación con otros años lectivos la venta de libros ha sido “pésima” porque no se ha vendido igual y los clientes se están “quejando”.
“Tuvimos que elevar un poco el precio dependiendo de las editoras. Algunos han aumentado entre 100 y hasta 300 pesos cada uno los libros de primaria”, detalló agregando que “al final los clientes se quejan pero tiene que llevárselos porque lo necesitan”, concluyó diciendo.
Tanto los vendedores como los padres exhortaron a las autoridades del Ministerio de Educación “no cambiar tanto” los libros de textos escolares para estos tener un equilibrio de adquisición y venta.