La primera misión de defensa planetaria de la Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés), llamada HERA, ha despegado, este lunes 7 de octubre, desde Cabo Cañaveral en un cohete Falcon 9 de SpaceX a las 16:52 hora española peninsular.
Después de varias horas de incertidumbre provocadas por la meteorología en esta zona de Florida (Estados Unidos), la nave finalmente viaja a su destino, el sistema binario de asteroides Didymos, al que llegará en otoño de 2026. Además, esta misión, diseñada para demostrar que es posible desviar un asteroide peligroso en curso de colisión con la Tierra, se enmarca en la colaboración internacional AIDA (Asteroid Impact & Deflection Assessment, por sus siglas en inglés).
¿Qué es la misión HERA?
HERA es una nave espacial de la ESA cuyo objetivo consiste en estudiar el impacto causado por DART (Double Asteroid Redirection Test, por sus siglas en inglés), una misión de la NASA que en 2022 colisionó con Dimorphos, un pequeño asteroide que orbita a otro más grande llamado Didymos.
HERA es la primera nave en explorar un sistema binario de asteroides y, durante los próximos seis meses, mapeará el cráter dejado por DART en Dimorphos, medirá su masa y analizará su estructura y superficie. De esta manera, dicha información permitirá a los científicos validar los modelos de impacto y mejorar las técnicas de desviación de asteroides —una habilidad fundamental para proteger a la Tierra en un futuro—.
Pero, ¿por qué es tan importante esta encomienda de la ESA? El mayor riesgo que los asteroides representan para la Tierra proviene de los de tamaño medio —aquellos que miden entre 100 y 300 metros—, además, un impacto de un cuerpo celeste rocoso de este tipo podría causar una devastación a gran escala. Por consiguiente, HERA pretende preparar el terreno para que, en un futuro, se pueda implementar de manera efectiva una estrategia de defensa planetaria basada en la desviación de asteroides.
Josef Aschbacher, director general de la ESA, afirma en un comunicado que «la defensa planetaria es una tarea inherentemente internacional. La sonda Hera de la ESA se encuentra a la vanguardia de los esfuerzos de Europa para ayudar a proteger la Tierra. Hera es un paso audaz para ampliar el compromiso de la ESA en materia de defensa planetaria».
Este el camino que le queda por recorrer a HERA
HERA y sus dos pequeños satélites del tamaño de una caja de zapatos, también conocidos como ‘CubeSats’, inician un largo viaje al lugar de los hechos para analizar las secuelas del impacto de la sonda DART.
No obstante, más allá esta encomienda principal, HERA también realizará desafiantes experimentos tecnológicos en el espacio profundo, incluido el despliegue de dos CubeSats para volar más cerca del asteroide objetivo, maniobrando en gravedad ultrabaja para adquirir datos científicos adicionales. Asimismo, esta nave espacial intentará navegar de forma autónoma alrededor de los asteroides gracias a un seguimiento visual.
Por otro lado, el lanzamiento de hoy pone a HERA en una trayectoria de salida directa desde la Tierra, comenzando su fase de crucero de dos años. «Una maniobra programada para el próximo mes será seguida por un acercamiento a Marte en marzo de 2025, lo que le dará a la nave espacial una velocidad adicional para su eventual encuentro con Didymos. Durante la asistencia gravitacional en Marte, Hera realizará un estudio de la luna marciana Deimos, desplegando sus instrumentos para uso científico por primera vez», explica la ESA en el comunicado.
Y, finalmente, la llegada a Didymos está prevista para el otoño de 2026, cuando la misión al asteroide entrará en su principal fase de demostración científica y tecnológica.
España juega un papel importante en esta misión
Desde España, Thales Alenia Space ha sido una pieza fundamental en el desarrollo de HERA, debido a que ha proporcionado el sistema de comunicaciones que permitirá a la nave enviar datos desde más de 500 millones de kilómetros de distancia. Estos datos incluirán información sobre la masa, densidad y características superficiales de Dimorphos, información vital para evaluar el impacto de DART y validar la técnica de desviación.
Por otro lado, dicha compañía mencionada también ha desarrollado la unidad de distribución y acondicionamiento de energía (PCDU, por sus siglas en inglés), que garantizará que HERA funcione correctamente durante los seis meses de su misión.