Los dominicanos, Jeremy Peña y José Sirí, han tenido un gran inició de temporada jugando en las paradas cortas y el jardín central de los Astros de Houston.

La tarea de Peña no es nada fácil, tiene que llenar los zapatos de una figura emblemática de la organización, que inclusive fue parte del único equipo campeón de serie mundial de la ciudad de Houston.

Con la eventual salida de Carlos Correa, vía la agencia libre, el primer nombre que llegó a la mente de muchos, para ser su sustituto, fue el del dominicano y hasta el momento no ha defraudado. 

Peña batea para .344, con un porcentaje de embasarse de .389 y .594 de slugging, ha conectado tres dobles y un cuadrangular, tiene cinco anotadas y tres carreras empujadas.

Decir que un pelotero del calibre de Correa no es extrañado es difícil de decir y pensar, pero hasta el momento el dominicano Peña está cumpliendo a cabalidad con las responsabilidades que conlleva ser el campo corto de los campeones de la división oeste de la Liga Americana en cuatro de los últimos cinco años.

Sirí se va ganando su tiempo de juego

 El titular del jardín central en Houston en Chas McCormick, pero desde su llegada al circuito mayoritario, el dominicano José Sirí, le causó una grata impresión al dirigente Dusty Baker.

En su año de debut Sirí bateó .304 en 21 partidos, conectó cuatro cuadrangulares, anotó diez y empujó nueve carreras, se robó tres bases y demostró que su guante y su actitud son de Grandes Ligas.

Sirí está más paciente en el plato y ha recibido dos bases por bolas en un poco más de 20 apariciones en el plato. 

En siete partidos batea .286 con un cuadrangular ha anotado cinco y empujado tres.

Si mantiene su producción, se quedará con el puesto titular del jardín central del conjunto, porque su guante y su actitud son de Grandes Ligas.