Si eres de las personas que ven mucho más práctico cargar el móvil de forma inalámbrica por su comodidad y lo fácil que es hacerlo en cualquier momento y lugar sin llenarte de cables, seguramente te frustre el momento en que te encuentras con que no es posible recibir energía porque no le llega corriente.

Seguramente ya lo hayas hecho muchas veces, pero si no es así vas a tener que comprobar que tu móvil es realmente compatible con la carga inalámbrica, ya que no todos tienen esta capacidad. También has de comprobar que el cargador inalámbrico que estás utilizando es compatible con tu móvil. Existen muchas marcas, modelos y opciones que podrían no ser compatibles entre sí.

Tampoco olvides otro de los fallos clásicos con la novedosa carga, las fundas suelen tener mucha culpa, pues las carcasas más gruesas impiden que la energía se transmita correctamente. Si tienes acceso a otro cargador inalámbrico, podrías ver si con este sí que va o te pasa lo mismo para ir descartando cosas.

Es un clásico pero funciona, apaga el móvil para comprobar si así se consigue cargar. En caso de que esté al 0%, tendrás que tener paciencia y como mínimo dejarlo 20 minutos para que pueda encenderse.

Por estas razones, tu móvil no se carga sin cable

Una de las razones más frecuentes por las que no llega la corriente a tu móvil es porque hay una mala conexión entre el móvil y la base de carga, así que asegúrate que lo has colocado correctamente. Lo mejor es que consultes en el manual de tu móvil para ver cuál es el punto de contacto según el modelo. Intenta mover el teléfono para que quede bien fijado y comprueba si así le llega corriente. Libera la base de carga y que solo esté el smartphone en ella.

Si no usas un cargador inalámbrico oficial o de calidad, puede que el problema es que este haya salido defectuoso o de mala calidad, o su cable. Si llevas tiempo usándolo, puede que se haya estropeado, así que asegúrate de que es ese el caso intentándolo con otros dispositivos compatibles que acepten este tipo de carga. Puede también que el enchufe donde está conectado la base de carga no funcione correctamente o está dando problemas.

Otra razón muy frecuente más allá de que se haya dañado el cargador o no sea de calidad suficiente es que el móvil se haya calentado demasiado e impide automáticamente que llegue la carga. Puede ser porque estás en la playa, es un día muy caluroso o te has pasado mucho tiempo jugando a juegos exigentes. Para evitar que se sobrecaliente, como medida de seguridad, los móviles actuales impiden la carga para no arriesgarse a posibles daños irreversibles.

También puede haber algún problema con el móvil, en ocasiones por falta de actualización o por una actualización que está causando problemas de este tipo, o que a la batería de tu teléfono se le han acabado los ciclos de vida. En este último caso, prueba a intentar la carga por cable porque si no va podría ser eso. Actualiza el móvil o espera a que haya una actualización que lo arregle si te encuentras con que esto es lo que sucede, ya ha pasado a algunos móviles en ocasiones.

Si nada de ello funciona, puedes intentar restaurar tu móvil de fábrica a ver si se arregla, pero es posible que tengas que contactar con un técnico para que te diga qué le pasa a tu móvil, o renunciar a este tipo de carga y hacerlo con cable.

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