El derribo de estatuas es un acto simbólico que no es nuevo, y es en sí en un elemento reivindicativo dentro de las protestas.
En redes sociales han circulado varios videos sobre el derribo de, al menos dos, estatuas de Hugo Chávez en Venezuela, luego de las elecciones realizadas el domingo, cuyos resultados son cuestionados por la oposición y más de una decena de países de América.
Lo que ocurre en Venezuela se ha visto en la historia en otros países donde los ciudadanos han derribado estatuas de presidentes en el poder o personajes históricos, como ocurrió en 2003 en Irak con la estatua de Saddam Hussein durante la intervención militar estadounidense.
Estatua de Saddam Hussein. (ARCHIVO)
Lo mismo ocurrió en Libia cuando estatuas con la figura de Muamar Khadafi fueron derribas en 2011. Las cabezas de las estatuas eran mostradas como verdaderos trofeos de guerra.
También fue derribada en Libia la escultura de un puño aplastando un caza de Estados Unidos.
Monumento de Gadafi Muamar Khadafi. (EFE)
En Budapest, Hungría, en 1956 fue destruida una estatua de Jose Stalin durante una manifestación anti-soviética.
En República Dominicana, en noviembre de 1961 miles de personas derribaron la estatua de Rafael Trujillo Molina que se encontraba en el hoy denominado Monumento a los Héroes de la Restauración en Santiago.
Estatua de Rafael Trujillo Molina. (IMÁGENES DEL ARCHIVO HISTORICO DE SANTIAGO/IMAGENES DE NUESTRA HISTORIA)
De su lado, el expresidente de México, Felipe Calderón, recordó que el derribo de estatuas de Lenin, Stalin, Gadafi, Ceausescu marcó el inicio de la caída estrepitosa de sus dictaduras.
Venezuela
Dos estatuas del expresidente Hugo Chávez fueron derribadas este lunes en Venezuela, en medio de protestas que rechazan la proclamación del mandatario Nicolás Maduro como ganador de las elecciones del domingo.
«Fueron a atacar al comandante Chávez, al comandante presidente, el mejor presidente que ha tenido Venezuela en 150 años», deploró Nicolás Maduro en una alocución televisada en la que mostró imágenes del derribo de las estatuas en La Guaira, puerto cercano a Caracas, y en la población de Mariara, en el estado Carabobo (centro).
«Es la típica imagen de las revoluciones de colores de los gringos«, aseveró Maduro.
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