El ministro de Industria, Comercio y Mipymes (MICM), Víctor -Ito- Bisonó, afirmó este lunes que la reciente disposición del gobierno haitiano que impide la importación terrestre de mercancías extranjeras a través de la frontera con República Dominicana no impacta negativamente a la industria nacional.
“Esa medida tiene un efecto operativo, porque hay un camionero y un ayudante que transportan la carga hasta la frontera, y desde ahí continúa su paso. Pero de ninguna manera afecta a la industria nacional”, señaló el funcionario durante su participación en la 55ª Asamblea General de la Asociación Latinoamericana de Instituciones Financieras para el Desarrollo (Alide).
La medida, establecida mediante la circular No. DAJ/BM/AGD/03-25/00479, fue emitida por la Dirección General de Aduanas de Haití bajo instrucciones del Ministerio de Economía y Finanzas, y entra en vigor este lunes 12 de mayo de 2025.
- A partir de ahora, toda mercancía extranjera que transite por territorio dominicano deberá ingresar a Haití únicamente a través de sus puertos marítimos, quedando prohibido el paso por la frontera terrestre.
Bisonó explicó que esta disposición responde a una decisión soberana del gobierno haitiano, pero reiteró que la industria dominicana, tanto agrícola como industrial —incluyendo las mipymes—, mantiene su capacidad de exportar hacia Haití y otras islas del Caribe.
“Esto no se trata de un conflicto entre ambos países. Es una decisión interna de Haití, probablemente vinculada a su situación de seguridad y al control de bandas. En algún momento tendrán que revisar la medida, porque la vía más eficiente para la llegada, acopio y distribución de mercancías sigue siendo a través de República Dominicana”, expresó.
Además, el ministro aclaró que los productos en tránsito no pagan impuestos en territorio dominicano, por lo que la medida no tiene implicaciones fiscales para el país.
“Es una decisión interna de Haití […] pero de ninguna manera afecta a la industria nacional”, insistió.
Bisonó también subrayó la importancia de los pasos fronterizos formales como Dajabón, Elías Piña, Jimaní y Pedernales, los cuales han servido históricamente como ejes clave del intercambio binacional.
Preocupación en la frontera
Aunque desde el gobierno dominicano se minimiza el impacto económico, la decisión haitiana ha generado inquietud entre importadores, transportistas y comerciantes de ambos lados de la frontera. La circular estipula que las aduanas terrestres haitianas dejarán de recibir mercancía extranjera y advierte que toda carga que viole esta disposición será decomisada.
Las autoridades aduanales haitianas contarán con el respaldo de la Policía Nacional de Haití (PNH) y las Fuerzas Armadas de Haití (FADH) para garantizar el cumplimiento de la normativa y decomisar los productos de camiones que incumplan la disposición, que originalmente había sido anunciada el pasado 7 de abril.
Funcionario haitiano detalla que las bandas se benefician
De acuerdo con las informaciones de Haití, las pandillas haitianas obtienen entre 60 y 100 millones de dólares al año por concepto de actividades vinculadas al comercio fronterizo con República Dominicana.
De hecho, el ministro de Economía y Finanzas de Haití, Alfred Métellus, declaró en una entrevista concedida en abril a la emisora haitiana Magik9 que este es un tema que buscan abordar.El funcionario explicó que el flujo irregular de contenedores dentro de Haití por pasos fronterizos como Malpasse permite a jefes pandilleros locales cobrar hasta 2,000 dólares por unidad, una cifra que, multiplicada por la cantidad mensual estimada de contenedores —alrededor de 3,000—, genera un volumen de ingresos millonario que termina en manos criminales.