El líder opositor venezolano Edmundo González Urrutia lamentó este miércoles que «demasiados hogares» tengan una Navidad con «mesas vacías» en su país, donde -subrayó- hay personas «injustamente» detenidas y familias que no pueden «acceder a lo esencial», algo que a su juicio «expresa una injusticia que no puede normalizarse».
En un mensaje en su cuenta de X, González Urrutia dijo que si bien estas fechas «invitan a una reflexión serena sobre su significado», el momento que vive el país «impide cualquier superficialidad».
«En la actual coyuntura nacional adquieren una relevancia ineludible valores que no admiten ambigüedad. Me refiero a la paz, entendida únicamente como resultado de la justicia, la democracia como principio y la libertad como derecho», indicó el líder opositor, quien se encuentra exiliado en España desde 2024.
El también exembajador manifestó que, de cara al fin de año, la esperanza «debe sostenerse en la convicción de que la justicia llega», y que es posible y necesario avanzar hacia una «sociedad más justa, más humana y solidaria».
«Una sociedad donde cesen las violaciones a los derechos humanos, las restricciones a las libertades individuales y donde el reencuentro nacional sea posible desde la verdad y el Estado de derecho«, añadió.
Más temprano, la hija del opositor, Mariana González, dijo que «esta Navidad no será como siempre» al recordar que su esposo, Rafael Tudares, permanece detenido desde el pasado 7 de enero, tres días antes de la investidura de Nicolás Maduro para un tercer mandato consecutivo luego de una cuestionada reelección.
«351 días sin saber dónde estás, sin escuchar tu voz, sin poder decirte ‘te amamos’ mirándote a los ojos. 351 días en los que nos arrebataron algo que ninguna familia debería perder: el derecho de estar juntos», manifestó Mariana González en su cuenta de X.
González Urrutia reclama la Presidencia de Venezuela desde el exilio al afirmar que derrotó en las presidenciales de 2024 a Maduro, a quien varios países, entre ellos Estados Unidos, consideran ilegítimo.


