Israel lanzó intensos bombardeos contra las aldeas agrícolas del noreste de Líbano el viernes y mató a por lo menos 52 personas, además de causar heridas a muchas más, informó el Ministerio de Salud libanés.
En tanto, en la Franja de Gaza, los palestinos recuperaron los cuerpos de 25 personas que fallecieron a causa de bombardeos israelíes que comenzaron el jueves, dijeron funcionarios médicos.
Israel ha intensificado su ofensiva contra los combatientes de Hamás en Gaza, y ha pulverizado áreas del norte del territorio palestino, lo que hace temer que empeoren las condiciones humanitarias para los civiles que aún viven allí.
En Líbano, Israel ha ampliado sus ataques contra centros urbanos más grandes, como la ciudad de Baalbek, hogar de 80.000 personas, después de inicialmente apuntar a pequeñas aldeas fronterizas en el sur, donde Hezbollah realiza operaciones. Hezbollah es un importante partido político y un proveedor de servicios sociales en Líbano.
Hezbollah comenzó a disparar cohetes, drones y misiles desde Líbano hacia Israel en solidaridad con Hamás después de que Israel lanzó su ofensiva en Gaza en respuesta al ataque de Hamás del 7 de octubre de 2023.
La lucha se convirtió en una guerra total el 1 de octubre, cuando las fuerzas israelíes lanzaron una invasión terrestre en el sur de Líbano por primera vez desde 2006.
El Valle de la Becá
En el Valle de la Becá, en Líbano —donde las pequeñas aldeas, olivares y viñedos ubicados entre las cadenas montañosas del país se habían librado en gran medida de los bombardeos israelíes hasta el mes pasado—, Israel lanzó intensos bombardeos el viernes, matando a por lo menos 52 personas, obligando a más familias a huir y enviando gruesas columnas de humo sobre el horizonte.
Los ataques israelíes en y alrededor de la ciudad nororiental de Baalbek han provocado el desplazamiento de 60.000 personas, vaciando aldeas cercanas, dijo Hussein Haj Hassan, un legislador libanés que representa la región.
Los rescatistas buscaban sobrevivientes después de que los bombardeos israelíes mataran a nueve personas y derribaran un edificio que albergaba a 20 personas en el pueblo de Younine.
Otros ataques israelíes mataron a 12 personas en el pueblo de Amhaz y a 31 más en al menos una docena de aldeas del noreste de Líbano, elevando el total de muertos a 52, dijo el Ministerio de Salud. Los bombardeos lesionaron a otras 72 personas, añadió el ministerio.
Israel no hizo comentarios sobre los ataques hasta el momento.
En la capital de Líbano, aviones israelíes bombardearon el suburbio sureño de Dahiyeh durante la noche y la madrugada del viernes por primera vez en cuatro días, generando pánico.
El ejército israelí, que advirtió a los residentes que desalojaran al menos nueve ubicaciones en Dahiyeh, afirmó que había atacado sitios de fabricación de armas y centros de comando de Hezbollah.
No hubo informes de víctimas de Dahiyeh, donde los temores de bombardeos israelíes impulsan una salida masiva de residentes cada noche.
Excavadoras limpiaban escombros de las calles donde los aviones de guerra israelíes destruyeron docenas de edificios.
Anteriormente hogar de familias y negocios, los bloques de apartamentos de altura media quedaron abiertos a la brisa, con las paredes arrancadas y los muebles enterrados. Los partidarios de Hezbollah en varias ubicaciones levantaron la bandera amarilla del grupo sobre los escombros.
Desde que estalló el conflicto entre Israel y Hezbollah el año pasado, más de 2.897 personas han muerto y 13.150 han resultado heridas en Líbano, de acuerdo con cifras del Ministerio de Salud, que no incluían todavía el número de víctimas del viernes.
Las autoridades indicaron que una cuarta parte de las víctimas mortales eran mujeres y niños.
Agencias de la ONU
Las agencias de la ONU estiman que la invasión terrestre y el bombardeo de Israel contra Líbano han desplazado a 1,4 millones de personas. Aproximadamente 60.000 residentes del norte de Israel cerca de Líbano también han sido desplazados por más de un año.
Hezbollah ha seguido disparando cohetes hacia el norte de Israel. Proyectiles lanzados desde Líbano el jueves mataron a siete personas, incluidos cuatro trabajadores agrícolas tailandeses.
Israel continuó bombardeando Gaza el viernes. Una serie de ataques israelíes contra el campamento de refugiados de Nuseirat, en el cento de la Franja de Gaza, mataron al menos a 21 palestinos, incluido un niño de 18 meses y su hermana de 10 años, según funcionarios de salud del Hospital Mártires de Al-Aqsa.
Israel también atacó una motocicleta en Zuwaida y una casa en Deir al-Balah, matando a cuatro personas más, dijeron funcionarios del hospital, con lo que el número total de muertos en Gaza el viernes ascendió a 25.
Israel dijo que había atacado infraestructura de Hamás y a un combatiente que operaba cerca del campamento de refugiados de Nuseirat, pero no comentó sobre los ataques fuera del campamento. Dijo que estaba al tanto de informes de bajas civiles y que estaba investigando.
En un anuncio separado, el ejército israelí dijo que su ataque contra un vehículo en la ciudad sureña de Jan Yunis mató a un miembro importante del buró político de Hamas, Izz al-Din Kassab, y a su asistente, Ayman Ayesh.
Hamas confirmó la muerte de Kassab, quien no era muy conocido por el público. Israel alegó que era un coordinador entre guerrillas en Gaza.
Hasta el momento no había señales de un avance en las negociaciones para un alto el fuego en Líbano o Gaza.
Hamás reiteró el viernes que cualquier alto el fuego debe ser permanente y debe incluir la retirada completa israelí de Gaza, y señaló que Israel sólo ha ofrecido una pausa temporal en la guerra y un aumento en los envíos de ayuda en las últimas negociaciones. No hubo comentarios de Israel por el momento.
“Las propuestas no satisfacen las necesidades integrales del pueblo palestino en términos de seguridad, estabilidad, alivio y reconstrucción”, dijo el alto funcionario de Hamás Bassem Naem, hablando primero a la televisión Al Aqsa de Hamas antes de confirmar la posición del grupo a The Associated Press.
La guerra de Israel en Gaza ha matado a más de 43.000 palestinos desde el 7 de octubre de 2023, cuando militantes de Hamas mataron aproximadamente a 1.200 personas en Israel y tomaron a unas 250 como cautivos.
Los ataques israelíes han retrasado repetidamente una campaña de vacunación de emergencia contra la polio, que la Organización Mundial de la Salud anunció que planeaba lanzar finalmente el sábado, pero sólo en Ciudad de Gaza. Las ciudades más al norte, como Jabaliya, Beit Lahiya y Beit Hanoun, siguen siendo inaccesibles debido al asedio israelí.
La ONU y otras organizaciones humanitarias advirtieron el viernes que “la situación que se desarrolla en el norte de Gaza es apocalíptica” debido a que Israel impide el ingreso de ayuda humanitaria a la zona, realiza redadas militares en hospitales, bombardea refugios y obstruye las tareas de los equipos de rescate palestinos que luchan por ayudar a los sobrevivientes después de los bombardeos israelíes.