Un joven conocido como «El Menor» fue dejado en libertad tras haber sido acusado de robar naranjas en una propiedad de la provincia San Francisco de Macorís. Según declaraciones del acusado, las naranjas pertenecen a tierras que eran de su padre, por lo que no considera que haya cometido un robo.
El caso había generado cierto interés en la comunidad, ya que algunos vecinos respaldaron la versión del joven, mientras que otros defendieron los derechos del actual propietario de la finca.
Las autoridades decidieron no imponer medidas adicionales tras su liberación, aunque recomendaron evitar conflictos futuros entre las partes.