Este artículo fue publicado originalmente en El Día.

Santo Domingo. – Un total de 49 mujeres han sido asesinadas a manos de sus parejas o exparejas en el período de enero a noviembre de este año, según datos estadísticos de la Procuraduría General de la República. De esa cantidad, 15 fueron feminicidios conexos.

Santo Domingo Este encabeza la lista con la mayor cifra de feminicidios, seguido por el Distrito Nacional con nueve y luego San Cristóbal con siete mujeres asesinadas a manos de su pareja o expareja.
Entre enero y octubre de este año se registraron 47 feminicidios, mientras que en el mismo período de 2024 se produjeron 61, lo que evidencia una disminución del 29.8 %, considerada un avance significativo en la gestión institucional en la lucha contra este flagelo que afecta a la sociedad.

El informe establece una cifra de 836 feminicidios ocurridos entre 2015 y 2025, con incrementos y disminuciones en el número de víctimas, siendo 2017 el año con mayor cantidad de mujeres asesinadas por sus parejas y exparejas.

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La violencia feminicida es la forma más extrema de violencia contra las mujeres y sus descendientes.
Desde 2015 hasta 2025, los Estados de América Latina y el Caribe han reconocido la gravedad de esta problemática y han aprobado leyes, protocolos y han construido institucionalidad específica para su abordaje.

A pesar de estos avances, el feminicidio persiste como una lamentable realidad. Durante años, República Dominicana ha registrado incrementos y disminuciones en las cifras de feminicidios. Estos datos estadísticos buscan visibilizar patrones de conducta, detectar tendencias y cumplir con estándares nacionales e internacionales para monitorear los avances en la materia.

El feminicidio es la causa de muerte de una mujer por razón de su género, independientemente de la edad, relación de pareja o lugar donde ocurra.

El feminicidio conexo ocurre cuando se asesina a una mujer sin ser ella el objetivo principal, dentro de un escenario de violencia feminicida.

Perfil de las víctimas y agresores

Más de la mitad de las víctimas eran amas de casa (53.06%), lo que refuerza el carácter doméstico y relacional de la violencia. El segundo grupo corresponde a empleadas del sector privado (12.24%), lo que evidencia que la vulnerabilidad está vinculada a factores económicos y sociales.

También se registran casos entre estudiantes y profesionales como profesoras y estilistas. Esto demuestra que el feminicidio afecta a mujeres de distintos niveles educativos y ocupacionales.

El 63.27% de los feminicidios fue cometido por la pareja actual, mientras que el 36.73% correspondió a exparejas. Estos datos confirman que la mayoría de los feminicidios ocurren en el entorno íntimo, motivados por dinámicas de control, celos o procesos de separación.

Los datos reflejan un patrón de violencia extrema, donde una proporción importante de los agresores termina suicidándose o fugándose tras cometer el crimen. El feminicidio no solo afecta a la víctima directa y su familia, sino también a la sociedad, como ocurrió en dos casos recientes del país donde la comunidad golpeó a los victimarios hasta causarles la muerte.

Los fines de semana, especialmente sábados y domingos, se concentran el 47.8% de los casos de feminicidios.

Entre los instrumentos utilizados para cometer los crímenes se encuentran: armas blancas, 21 mujeres asesinadas; armas de fuego, 18 víctimas; golpes contusos, 5 víctimas; quemaduras, 2 casos; asfixia por estrangulación, 2 casos y envenenamiento, un caso.

La Organización de las Naciones Unidas no hace distinción específica entre los tipos de armas usadas en feminicidios; sin embargo, enfatiza que las armas de fuego, lícitas o ilícitas, representan un factor de riesgo particular para las mujeres, aumentando la letalidad en la violencia de pareja, sin dejar de lado los demás instrumentos utilizados por los feminicidas.

Órdenes de protección y denuncias

De los 49 feminicidios registrados al cierre de octubre de 2025, ocho víctimas habían interpuesto denuncias contra su agresor y se habían emitido órdenes de protección y alejamiento.

Esto demuestra que la mayoría de los casos no habían sido denunciados previamente.

Las órdenes de alejamiento son fundamentales para la protección de la integridad de la víctima. En este sentido, el Ministerio Público continúa fortaleciendo las medidas de protección una vez interpuesta la denuncia.

Hijos huérfanos por feminicidio

Los feminicidios en República Dominicana, al 21 de noviembre de 2025, dejaron más de 37 niños, niñas y adolescentes huérfanos, y se reportó la muerte de 2 menores durante los hechos.

El impacto familiar y psicológico es severo. La muerte de una mujer en un contexto de feminicidio no solo vulnera su derecho a la vida, sino que deja a sus hijos e hijas en situaciones de extrema vulnerabilidad, e incluso expone sus vidas a riesgo, producto de la violencia feminicida.

Mujeres sobrevivientes de violencia

Los datos reflejan que la demanda de servicios de atención para sobrevivientes de violencia se mantiene alta y constante entre 2020 y 2025, con picos importantes en 2023 y 2025. La variabilidad anual sugiere la influencia de factores como mayor accesibilidad a servicios, campañas de sensibilización, fortalecimiento institucional, fluctuaciones en el registro y cambios sociales y económicos.

En conjunto, se evidencia la relevancia de mantener y ampliar los servicios del Centro de Atención, garantizando una respuesta oportuna, multidisciplinaria y centrada en la protección de las mujeres víctimas de violencia.

Los tres Centros de Intervención Conductual para Hombres registran aumentos significativos en la atención de 2020 a 2025.

• Distrito Nacional: 2020 (4,779), 2021 (5,253), 2022 (5,886), 2023 (7,850), 2024 (7,625), 2025 (12,354 hasta octubre).

• Regional Norte (Santiago): 2020 (356), 2021 (745), 2022 (780), 2023 (903), 2024 (1,760), 2025 (990).

• San Juan de la Maguana: 2020 (78), 2021 (115), 2022 (146), 2023 (372), 2025 (160).

Los datos reflejan un uso creciente de medidas de intervención conductual como estrategia para prevenir reincidencia, modificar patrones violentos y reducir la violencia intrafamiliar y de género.

La Procuraduría General de la República cuenta con Línea Vida, que mantiene una alta demanda y refleja una sostenida confianza de la ciudadanía. Las denuncias han aumentado gradualmente, lo que indica mayor uso de este canal para activar procesos formales.

También están las fiscalías en cada jurisdicción para recibir denuncias por violencia de género, intrafamiliar y contra menores de edad.

La violencia se manifiesta por agresión física, psicológica, económica y financiera, entre otras. Los servicios de atención a víctimas buscan garantizar su protección, restituir sus derechos y contribuir a su recuperación física, emocional, social y legal.

El pasado 25 de noviembre se conmemoró el Día internacional de la eliminación de la violencia contra las mujeres.

La publicación Los feminicidios, el cáncer de una sociedad de hombres machistas, afectan a la familia apareció primero en El Día.