SAN FRANCISCO DE MACORÍS.— Randy Díaz, de 24 años, negó las acusaciones de haber desmantelado y traficado motocicletas hacia Haití, pese a haberse entregado voluntariamente a la Dirección Central de Investigación Criminal (DICRIM) en esta ciudad.

Tras su detención, Díaz aseguró ante la prensa que los motores estaban bajo acuerdos de compra y pago legales. También rechazó las versiones que lo señalan de haber “muchado” los vehículos y alterado sus chasis para su venta ilícita. No obstante, admitió conocer la ruta utilizada para el traslado, mencionando a Dajabón como punto de traspaso hacia el país vecino.

El joven afirmó que esta es la primera vez que enfrenta una situación de esta naturaleza y expresó arrepentimiento, manifestando su interés en llegar a un entendimiento con la parte afectada. Según dijo, intentó establecer un acuerdo con los propietarios de la agencia, pero estos lo rechazaron y exigieron la devolución inmediata de los motores.

Antes de finalizar, Díaz hizo un llamado a los dueños de la agencia para retomar el diálogo: «Que lleguemos a un acuerdo». Las autoridades mantienen abierta la investigación para esclarecer el caso y determinar las responsabilidades correspondientes.