Este artículo fue publicado originalmente en El Día.
Nick Reiner, de 32 años, hijo del reconocido cineasta Rob Reiner, fue acusado formalmente por la Fiscalía del condado de Los Ángeles de dos cargos de asesinato en primer grado por la muerte de sus padres. La acusación incluye la figura de “circunstancias especiales”, lo que abre la posibilidad legal de una condena a cadena perpetua sin libertad condicional o incluso a la pena de muerte.
Aunque en California los casos de homicidio suelen castigarse con cadena perpetua con opción a libertad condicional tras 25 años, la Fiscalía sostuvo que la presunta comisión de asesinatos múltiples constituye un agravante que eleva significativamente el castigo potencial, según lo establece el código penal estatal.
Las denominadas circunstancias especiales permiten que un caso de homicidio sea considerado entre los más graves del sistema judicial. Además del asesinato múltiple, esta figura contempla otros supuestos como crímenes con motivación económica, el homicidio de funcionarios públicos o actos cometidos con extrema crueldad.

El fiscal del distrito de Los Ángeles, Nathan Hochman, aclaró que su oficina aún no ha decidido si solicitará la pena de muerte. “No se ha tomado una determinación final y se tendrán en cuenta los deseos de la familia Reiner”, señaló durante una rueda de prensa ofrecida esta semana.
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Hochman reconoció la complejidad emocional y jurídica del proceso, al tratarse de un caso intrafamiliar. “Este tipo de procesos son de los más difíciles y dolorosos para el sistema judicial, por la cercanía entre las víctimas y el acusado”, afirmó.
La posibilidad de una condena capital surge, sin embargo, en un contexto particular. Desde 2019, California mantiene una moratoria sobre las ejecuciones, decretada por el gobernador Gavin Newsom. Aunque la medida suspendió la aplicación práctica de la pena de muerte, no eliminó su validez legal.

“La pena capital sigue siendo una opción jurídica en el estado”, explicó Aya Gruber, profesora de Derecho Penal de la Universidad del Sur de California. “Los fiscales pueden solicitarla y los tribunales pueden imponerla, aunque actualmente no se ejecuten sentencias”, precisó. En la actualidad, alrededor de 580 personas permanecen en el corredor de la muerte en California.
Además de los cargos principales, la Fiscalía anunció que añadirá una acusación especial por el uso de un arma letal, presuntamente un cuchillo. Este agravante tendría un impacto limitado en la condena si el acusado fuera declarado culpable de delitos menores.

Hochman, quien asumió como fiscal del distrito en 2024, revocó la política interna de su antecesora que restringía el uso de la pena de muerte en el condado, aunque reiteró que solo se considerará en casos excepcionales.
Expertos legales han expresado sorpresa ante la posibilidad de que se contemple una condena capital. Algunos señalan que factores como el historial personal del acusado y la postura de la familia podrían influir en el desenlace, mientras que otros interpretan la mención de la pena de muerte como una estrategia procesal para incentivar un acuerdo judicial.
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