El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, se reunió este martes con familiares de tres ciudadanos españoles detenidos en Venezuela «sin base legal», a los que aseguró que su Ejecutivo va a seguir haciendo gestiones «a todos los niveles» para lograr su liberación y repatriación.
El Gobierno informó en un breve comunicado acompañado de fotografías y video de este encuentro en el Palacio de la Moncloa, la residencia oficial del jefe del Ejecutivo, al que también asistió el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares.
Entre los familiares recibidos en la Moncloa están los de José María Basoa y Andrés Martínez Adasme, ambos de la ciudad española de Bilbao, cuya detención anunció el gobierno de Nicolás Maduro el 14 de septiembre de 2024 en medio de una escalada de tensión con España tras la llegada a Madrid del dirigente opositor exiliado Edmundo González.
Exiliado en España
Edmundo Gónzalez está exiliado en España, después de que Nicolás Maduro se proclamase vencedor de las últimas elecciones presidenciales en el país sudamericano, resultados cuestionados por la oposición, que reivindica al dirigente opositor como ganador de estos comicios.
A estos dos españoles detenidos en Venezuela se los acusa de estar implicados en una supuesta operación que tenía como objetivo llevar a cabo actos «terroristas», entre otros el de asesinar al presidente Maduro.
Sánchez recibió también a familiares del periodista canario Miguel Moreno Dapena, que fue detenido el pasado mes de junio al interceptar Venezuela el barco de exploración marina en el que viajaba, alegando un comportamiento «muy sospechoso» del mismo.
El barco de exploración marina N35, con bandera de Panamá, capitán neerlandés y empresa belga (Siatec), se dedicaba a buscar pecios de buques hundidos durante la II Guerra Mundial y, cuando fue interceptado, se movía en el entorno del Caribe y la costa oriental de Venezuela.
En aquel momento, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, informó de que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana lo interceptó al considerar que realizaba «investigaciones científicas» con un comportamiento «muy sospechoso» en la zona económica exclusiva del país.
Además de Basoa, Martínez Adasme y Moreno Dapena, otros once españoles se encuentran detenidos «arbitrariamente» en cárceles de Venezuela, según informó en mayo el Gobierno español, que matizó que el resto de presos son ciudadanos con doble nacionalidad, nacidos y residentes en el país sudamericano.
La ONG Foro Penal, que lidera la defensa de los presos políticos venezolanos, contabiliza 902 detenidos por motivos políticos en el país, de los cuales 86 tienen otra ciudadanía o doble nacionalidad, según un boletín que tiene como fecha de corte el 15 de diciembre.


